¿Cómo funciona el reparto de bienes del matrimonio en caso de divorcio?

reparto de bienes divorcio

¿Cómo funciona el reparto de bienes del matrimonio en caso de divorcio?

En un artículo anterior hablábamos acerca de cómo se califican los bienes matrimoniales y cómo influye esta calificación a la hora de su reparto en caso de divorcio. En este nuevo post ahondamos un poco más en esta cuestión. ¿Cómo funciona el reparto de bienes del matrimonio en caso de divorcio? ¿Qué puede esperar cada cónyuge? Lo primero es atender al modo en que se produjo el divorcio, además de a la calificación de los bienes. Si necesitas más ayuda o información, no dudes en contactarnos.

¿Qué tipos de régimen matrimonial existen y cómo influyen en el reparto de bienes en un divorcio?

Repasamos brevemente los tipos principales de régimen matrimonial que existen:

  • Régimen de sociedad de gananciales: Mediante este régimen coexisten dos tipos de bienes: los privativos de cada cónyuge (cada uno de ellos sería dueño de los suyos propios), y el patrimonio ganancial (el formado por los bienes adquiridos durante el matrimonio con las ganancias que obtengan los cónyuges con su trabajo o actividad, entendiéndolo en sentido amplio, así como con las adquisiciones a título oneroso que se produzcan durante el matrimonio, cualquiera que sea la clase del bien adquirido). Este es el régimen de aplicación subsidiaria cuando los cónyuges no han pactado ningún tipo de régimen económico para su matrimonio.
  • Régimen de separación de bienes: En este caso, los patrimonios de cada uno de los cónyuges se encuentran completamente separados durante toda la vida del régimen, y se relacionan entre sí como los patrimonios de dos extraños. Cada cónyuge sería dueño de sus bienes previos al matrimonio y de los adquiridos de forma individual durante éste.

En el caso del régimen de separación de bienes, el divorcio se hace más sencillo en cuanto a la cuestión económica, ya que está claro de antemano qué bienes pertenecen a cada cónyuge. Sin embargo, en nuestro país, lo más habitual es que el régimen elegido sea el de sociedad de gananciales, lo que complica la situación en caso de divorcio.

Tipos de divorcio y reparto de bienes

Existen dos tipos de divorcio, y la forma que éste adopte será determinante a la hora de repartir los bienes, facilitando o no la tarea del abogado:

  • Divorcio de mutuo acuerdo: El divorcio “amistoso” resulta mucho más ágil y sencillo que el contencioso, ya que no exige la celebración de juicio. Las partes alcanzan un pacto relativo, entre otras cosas, al reparto de bienes, lo que también abarata el proceso. Basta la presentación de la demanda y del convenio regulador pactado entre ambos, y su posterior ratificación en el Juzgado por ambos cónyuges. Ambos pueden acudir representados por el mismo abogado y procurador, con el consecuente ahorro de gastos.
  • Divorcio contencioso: En el divorcio contencioso la situación se complica. La demanda de divorcio es presentada por uno solo de los cónyuges, y esta contendrá, a falta de acuerdo, una propuesta sobre las medidas que deben adoptarse respecto a la guarda y custodia de los hijos, pensión alimenticia, compensatoria… y reparto de bienes. El juez valorará esta propuesta y dictará sentencia resolviendo todos estos puntos. Cada parte deberá contar con su propio abogado y procurador.

¿Qué pasos hay que dar para el reparto de bienes en caso de divorcio?

El primer elemento que marca la diferencia a la hora de repartir los bienes conyugales entre los divorciados es el modo en que éste se produce. En los divorcios de mutuo acuerdo, se llega a un pacto entre las partes que lleve a cabo la distribución que convenza a ambos cónyuges. Sin embargo, en los casos en que un sólo cónyuge reclamó el divorcio, pueden encontrare mayores dificultades.

En estos casos, hay que atender al reparto ‘equitativo’ de la sociedad conyugal y, dado que un patrimonio conjunto nunca es nítidamente divisible, se tendrá que llevar a cabo una valoración económica de los bienes que se van a distribuir.

Para llevar a cabo la tasación de todos lo bienes, cada cónyuge puede recurrir a los especialistas propios que hagan una valoración aproximada de cada una de las propiedades. Por ejemplo, en el caso de bienes inmuebles, se suele recurrir a inmobiliarias, así como para vehículos se atiende al valor de mercado que marcan los especialistas en este área, etc.

El resultado de dichas negociaciones no se suele saldar con el reparto 50-50% de los bienes del matrimonio, puesto que -a pesar de que el objetivo sea ese- también se atiende a criterios de necesidad, como en el caso del mobiliario de la casa común, que se repartirá según acuerden o necesiten ambas partes. Esto se plasma claramente en los muebles propios de hijos menores, en caso de que los haya, que serán para el cónyuge que se quede con la tutela, en caso de que esto ocurra.

En cualquier caso, las dificultades a las que hemos de enfrentarnos durante el proceso de divorcio hacen necesario que contemos con el asesoramiento legal de juristas especialistas en Derecho Matrimonial, separaciones y divorcios. Por ello, desde Kernel Legal te animamos a contactar con nosotros si te encuentras en esta difícil situación. Recibirás el mejor asesoramiento de la mano de nuestro equipo de especialistas.



Abrir chat
Hola,
¿En qué podemos ayudarle?