La nueva Ley de Vivienda ya se encuentra en vigor y, con ella, la nueva obligación de que sea el propietario quien asuma los gastos de gestión inmobiliaria, una partida que tradicionalmente solía abonar el arrendatario, normalmente en forma de una cantidad equivalente a una mensualidad de alquiler.
Desde el pasado 26 de mayo es obligatorio que el propietario, y no el inquilino, pague los gastos de agencia inmobiliaria al firmarse un contrato de alquiler. Sin embargo, muchos clientes acuden a nuestro despacho denunciando que las inmobiliarias siguen cobrándoles esta partida. En algunos casos se obliga al arrendatario a firmar que ha sido el propietario quien los ha abonado, a pesar de no ser cierto”.
Se trata de los honorarios que cobra la inmobiliaria por poner en contacto a propietario y arrendatario. Las agencias se encargan, entre otras cosas, de preparar la vivienda para salir al mercado de alquiler, gestionar anuncios y agenda de visitas, enseñar la vivienda, recopilar datos sobre los futuros inquilinos…
Además, existen los llamados gastos de formalización del contrato, que se refieren a la redacción del contrato de alquiler según la normativa y las condiciones que pacten las partes, así como la gestión de su firma.
Normalmente, especialmente en grandes ciudades como Barcelona, se le ha exigido al inquilino el pago de los gastos de inmobiliaria y formalización del contrato, en gran parte debido a la escasa oferta de vivienda, a la elevada competitividad para acceder al mercado inmobiliario (especialmente entre las rentas más bajas) y al hecho de que el inquilino es normalmente la parte mas débil a la hora de negociar.
Sin embargo, lo cierto es que el principal beneficiario de estos servicios es el propietario, ya que la inmobiliaria realiza gran parte de su trabajo a su favor. Las condiciones del contrato, además, suelen redactarse a la medida de las necesidades del arrendador.
Si firmaste o renovaste tu contrato de alquiler de vivienda habitual a partir del 25 de mayo y pagaste gastos de gestión inmobiliaria o gastos de formalización de contrato, puedes reclamar.
Ten en cuenta que la inmobiliaria puede utilizar otra nomenclatura. Por ejemplo, “Servicios a prestar contratados por el cliente”.
Lo único que te corresponde abonar es el precio del alquiler y la fianza.
Necesitarás la documentación relacionada con tu alquiler (contrato, reserva y demás documentos generados en el proceso), así como justificantes de pago, factura emitida por la inmobiliaria…
Nos encargaremos de recuperar tu dinero evitando la vía judicial. Solo en caso de negativa por parte de la empresa llevaremos tu caso a los juzgados.